Mi nombre es Angélica, soy el cerebro y corazón detrás de ingredientesmágicos. Un proyecto con mi sello personal, donde aúno mi pasión por una alimentación sana y flexible con las ganas de acompañarte a descubrir la forma de alimentarte que mejor va CONTIGO.
Mi nombre es Angélica, soy el cerebro y corazón detrás de ingredientesmágicos. Un proyecto con mi sello personal, donde aúno mi pasión por una alimentación sana y flexible con las ganas de acompañarte a descubrir la forma de alimentarte que mejor va CONTIGO.
Soy una mujer entusiasta, alegre y muy detallista. Las personas con las que trabajo dicen de mí que soy una persona cercana, con la que te puedes comunicar fácilmente.
Lejos de lo que puedas pensar, adoro el chocolate, el aguacate y me derrito ante la crema de cacahuete. Para mí, tener un estilo de vida saludable no es incompatible con el disfrute y el placer. El deporte aporta vitamina a mi vida y estoy convencida que nada nos nutre tanto como el amor (sea del sabor que sea).
Culo inquieto de nacimiento y dinámica por naturaleza, mi forma de trabajar ha evolucionado conmigo durante los diez últimos años. Además de mi formación como dietista-nutricionista y maestra, he realizado multitud de cursos, con los que no pretendo aburrirte (deportiva, clínica, obesidad, digestiva, coaching nutricional…).
Pero hay cosas que no se aprenden en los libros, me lo enseñan las personas que acuden a consulta cada día. Yo lo tengo claro, mi PRIORIDAD eres TÚ, tu contexto y el punto en el que te encuentras, conocerte bien, para ofrecerte el mejor servicio de nutrición posible.
Yo como tú, voy dejando atrás hábitos que ya no encajan conmigo y voy incorporando nuevos aprendizajes a diario.
Ahora, organizo mi agenda para dejarme espacio para practicar Crossfit, y dejar atrás el “no tengo tiempo” para incluirme en mi lista de prioridades. Planifico mi menú semanal y mi compra para encajarlo con mi horario laboral y no pasar el día en la cocina.
He pasado por problemas digestivos durante años, el estrés también se adueña de muchos de mis días y al mirarme al espejo he rechazado la imagen que este me devolvía en más de una ocasión. ¿Te suena esto?
Y ya ves, esta también soy yo, humana y vulnerable. Nos une mucho más de lo que Instagram, nos cuenta…
Si estás cansada de darle mil vueltas a lo que comes, ha llegado el momento de hacer algo distinto.
